jueves, 21 de enero de 2010

Camino hacia el título


"Ingeniero viene de ingenio, lo sabes ¿no?"


Estas fueron las palabras que me dijo mi tío hace 5 años, cuando le conté que había tomado la decisión de estudiar Ingeniería Industrial. Siempre he sentido admiración por él, aunque no hayamos compartido muchos momentos juntos, todos ellos han sido intensos.

Momentos antes de comentarle mi decisión, estaba nervioso. Años antes, cuando todavía no era consciente del amplio abanico de carreras universitarias a mi alcance y mucho menos conocía su descripción, se me ocurrió decir en su presencia que quería ser informático (siempre se me ha dado bien interactuar con estos bichos, pero mi historia como hacker, la dejaré para otro día). Él me miró fijamente, soltó una carcajada, y con 3 frases consiguió que esa idea saliera de mi cabeza. Y se lo agradezco. Soy un friki de la informática y los gadgets, pero no deja de ser un hobbie.

Poco a poco me hice mayor, y a los 16 años ya vi que lo mío eran las matemáticas y la física. Primera decisión. Fácil. Bachillerato tecnológico.

Hasta que llega la hora. El colegio se acaba, y tienes más salidas para escoger que en el nudo de la trinidad. A base de informarte, leyendo y preguntando, haces como en un examen tipo test cuya respuesta desconoces: empiezas a descartar opciones. Al final llegas al peor momento de la pregunta, cuando sólo quedan 2 opciones. Ellas eran Ingeniería de caminos, canales y puertos e Ingeniería industrial.

Cabe decir, que si descarté la primera y me incliné por la segunda, fue por motivos a priori ingenuos. Pero actualmente estoy 100% seguro de que tomé la decisión correcta y me alegro de que así sea.

Durante estos últimos 5 años de carrera he aprendido muchas cosas. Cosas muy interesantes que me gustaría dar a conocer, que me gustaría comentar y explicar. Y es por ello que hoy empiezo este blog.

Si te interesan los juegos matemáticos, los problemas físicos, las curiosidades de la vida que te rodea... Espero que me sigas de cerca!

1 comentario:

  1. Gauss, a parte de los hallazgos, es el hombre que salvó a muchos estudiantes, y el hombre que, con su campana, mejor definió a la población.

    Dejó muchas teorías en esa idea, y no sólo matemáticas...

    Buena elección, llamarte como él.


    Bienvenido.

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